El Barça acude con ganas al encuentro del Bayern y del Madrid después de despachar en media hora al Sevilla. El equipo de García Pimienta se quedó petrificado desde que fue sancionado con un discutible penalti que supuso el 1-0. Todo giró en contra del Sevilla, refugiado en la coartada arbitral, y a favor del Barcelona, pletórico y admirado por más gente que nunca en Montjuïc. Los azulgrana se regalaron un partido exquisito y nada exigente que reforzó su liderato en la Liga con tres puntos más que el equipo de Mbappé y Vinicius. El Pichichi de momento es Lewandowskique lleva 14 goles, después de poner una vez más el punto final a un equipo que marcó cada vez que chutó hasta el 3-0, imposible de defender para el Sevilla.
5
Iñaki Peña, Iñigo Martínez, Pau Cubarsí, Jules Koundé, Alejandro Balde, Lamine Yamal (Pablo Torre, min. 75), Raphinha (Fermín López, min. 65), Ansu Fati (Gerard Martín, min. 75), Pedri (Gavi , min. 82), Marc Casadó y Robert Lewandowski (Pau Víctor, min. 65)
1
Ørjan Nyland, Loïc Badé, José Ángel Carmona, Marcão, Adrià Pedrosa (Gonzalo Montiel, min. 80), Lucien Agoumé (Stanis Idumbo Muzambo, min. 69), Peque Fernández (Suso, min. 45), Nemanja Gudelj, Dodi Lukébakio , Chidera Ejuke (Albert Sambi Lokonga, min. 45) e Isaac Romero
Goles
1-0 min. 23: Lewandowski. 2-0 min. 27: Pedro. 3-0 min. 38: Lewandowski. 4-0 min. 81: Pablo Torre. 4-1 min. 86: Stanis Idumbo Muzambo. 5-1 min. 87: Pablo Torre
Árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea
Tarjetas amarillas
Adrià Pedrosa (48 min.), Ansu Fati (73 min.), Djibril Sow (84 min.)
Necesitan ya los barcelonistas de los mayores desafíos para saber de sus posibilidades después de un excelente comienzo en la Liga. Nadie mejor para calibrar su fuerza que su bestia negra alemana y el rival de siempre en el Bernabéu. El equipo, de momento, rebosa confianza, muy acertado en ataque y solvente en defensa, especialmente bien orientado por Pau Cubarsí e Íñigo Martínez y cada vez con más jugadores a disposición de Flick.
No era fácil negociar una alineación solvente por el calendario y la recuperación de futbolistas que se supone tendrán un papel relevante como Olmo, Gavi, De Jong y Fermín. El entrenador apostó de inicio por dar continuidad al equipo habitual con Iñaki Peña en la portería y la inclusión en la medular de Eric hasta que el central se lesionó en el calentamiento y fue sustituido por Ansu Fati, un delantero que maniobra también de interior con Flick. El técnico intenta no perder jugadores en una calculada gestión de vestuario y quiere que Peña se sienta titular —ha sido confirmado también ante el Bayern— y no un suplente también del recién fichado Szczesny por la lesión de Ter Stegen.
Peña tuvo que estar atento a Lukébakio, un delantero potente y rápido, siempre habilitado por el pase largo de Nyland. El guardameta descargaba en Lukébakio para evitar la presión azulgrana y aprovechar el espacio liberado por Balde. Los laterales barcelonistas son muy exigidos físicamente por el mucho campo a cubrir y los contrarios sitúan a sus mejores extremos para alcanzar posiciones fáciles de remate ante Peña. Lukébakio enganchó dos tiros en un cuarto de hora antes de que Raphinha cayera en el área por un toque de Peque después de un pase de Lamine. El árbitro pitó penalti ante el quejido colectivo del Sevilla y Lewandowski marcó en el primer tiro del Barcelona.
Muy efectivos en ataque estático, los azulgrana fueron terminales también al contragolpe y a balón parado, como ya es costumbre con Flick. Pedri recuperó una pelota en la divisoriasiguió la jugada prolongada por Raphinha, Lewandowski y Lamine y remató desde el balcón del área después de ser habilitado por Koundé. El francés dejó pasar la pelota y Pedri enganchó un tiro a la escuadra de Nyland: 2-0. El 3-0 llegó en un córner cuando Lewandowski puso el pie a un tiro de Raphinha. Tres goles en cuatro disparos porque entremedias Nyland estuvo espléndido en un tiro del ariete después de una transición armada desde su área por Cubarsí. Los azulgrana, igual de dominadores que al inicio, perdieron acierto después del descanso mientras que dos goles del Sevilla fueron anulados por fuera de juego, un recurso que se impone por convicción en el Barça. Al Sevilla, un equipo todavía indefinidole falta cintura para aplicar el método de García Pimienta, La rueda de cambios hizo menos pesaroso el encuentro a la espera del regreso de Gavi. El clamor de la hinchada no modificó la hoja de excel de Flick. El entrenador reservó a Lewandowski, Raphinha y Lamine y refrescó al equipo con futbolistas como Pablo Torre. El volante puso el 4-0 justo antes de que reapareciera Gavi.
El momento fue tan emotivo que encendió Montjuïc. Gavi salió por Pedri y se ató la cinta de capitán después de 11 meses de ausencia para que entrara en calor con vistas al martes y al sábado en el Bernabéu. La distensión azulgrana provocó el gol del honor del Sevilla en una carrera estupenda de Idumbo. No fue el último tanto, sino que Pablo Torre repitió en un golpe franco para poner el 5-1. Ninguna vitamina mejor que la del dígito mágico (5) para cerrar una noche alegre a la espera de batirse con el Bayern y el Madrid.